Existen muchas personas y emprendedores que deciden crear su propio negocio de hostelería y hacer de ello su modo de vida.

Es importante tener en cuenta de que antes de empezar, se debe de disponer de capital para poder invertir en un local, maquinaria, trabajadores, publicidad, género… Pero estos no son únicamente los gastos principales. Como cualquier negocio, es muy normal que no comience a generar beneficios hasta pasados unos meses o incluso años, antes de poder amortizar todo lo invertido y empezar a generar ganancias.

Por eso, si no disponemos de un gran capital, es importante ajustar al máximo los gastos iniciales más fuertes para tener una buena rentabilidad en un futuro.

Local y mobiliario

Disponer de un local estratégicamente situado es primordial, debemos de tener en cuenta nuestros posibles futuros clientes y por eso, tendremos que estudiar donde pueden encontrarse y cómo llegar hasta ellos ubicando nuestro local en una zona estratégica teniendo en cuenta su dimensiones, precio, obras y mobiliario.

El mobiliario será una inversión bastante grande, de modo que podemos apostar por mobiliario y diseños de local económicos, invirtiendo así en lo primordial y necesario.

Maquinaria de hostelería

La maquinaria será una de las opciones que tendremos que valorar su calidad, durabilidad, uso y necesidades del negocio.

Freidoras, neveras, congeladores, máquinas de hielo, planchas, vitrinas, microondas, cocinas, aires acondicionados… Mucha de esta maquinaria será necesaria para el desarrollo normal del negocio según si queremos abrir un restaurante, bar, hotel u/o cualquier otro abierto al público donde se sirvan comidas.

Adquiriremos siempre buenos equipos y de buena calidad, ahorrar en maquinaria nos puede suponer muchos dolores de cabeza en un futuro y con el resultado de no amortizar de forma correcta los mismos.

La maquinaria de hostelería será vital para poder desarrollar el negocio con efectividad, dando a nuestros clientes un buen servicio y calidad en todos nuestros productos.

El personal y el servicio al cliente

Al principio será difícil contar con mucho personal. Un trabajador supone un gran gasto para el negocio y hasta no ver el desarrollo y necesidades del mismo, conviene evaluar el volumen de trabajo durante las diferentes épocas del año.

Será necesario que invirtamos muchas horas de nuestro tiempo y contratar únicamente el personal necesario en los picos de trabajo más altos. Aunque siempre tendremos que tener en cuenta, no escatimar siempre en personal, ya que por querer ahorrar, nuestro servicio y atención al cliente también podrían verse perjudicados.

Publicidad

Hasta no tener una clientela recurrente y fiel que conozca nuestro negocio, deberemos de invertir una buena parte de nuestras ganancias en publicidad de diferentes formas. Diarios locales, reparto de publicidad a domicilio, página web, redes sociales, boca a boca…

La publicidad es primordial para que cualquier negocio funcione y pueda tener nuevos clientes, además de conocer nuestras promociones las diferentes épocas del año y días de la semana.

Si controlamos nuestro gasto al principio, nuestro negocio de hostelería podrá sobrevivir más tiempo, de esta forma, en un futuro siempre podremos invertir en mejores instalaciones, maquinaria y personal para brindar el mejor servicio a nuestros clientes.